Desgraciadamente la percepción que tiene la sociedad sobre el trabajo que realiza los gestores de Fincas, es muy mala.
La mayoría opinan que se trata de un trabajo muy fácil de realizar y además piensan que los honorarios que cobramos no están justificados. De hecho, piensan que cualquier persona podría realizar nuestro trabajo.
Cuando escucho estas opiniones, me viene a la mente las tertulias deportivas sobre la figura del entrenador en un equipo de futbol.
Todos llevamos un entrenador de futbol dentro y tenemos nuestra alineación ideal. Pues en nuestro sector ocurre lo mismo…
Todo el mundo lleva en su interior un Gestor de Fincas.
El trabajo que realizan los profesionales de la Gestión de Fincas es complejo y delicado, ya que en definitiva administramos los bienes que más valor tienen para las personas: Sus propias viviendas.
Los Gestores de Fincas, tiene que poseer un amplio conocimiento sobre diversas materias (contabilidad, seguros, fiscalidad, etc),
Todo ello para poder realizar su trabajo con solvencia, y esto supone una importante inversión en formación y actualización continua.
Son requisitos que parecen presuponerse a la figura del Gestor de Fincas, pero el hecho de no mencionarlo continuamente, no quiere decir que sean tareas simples o sencillas. Al contrario, llevar una contabilidad detallada y actualizada de una comunidad de propietarios es compleja y supone una inversión importante de tiempo y medios. Además de ser fundamental, para tener un control económico de la comunidad.
Paso a detallar algunos de las cualidades ó los valores que considero deben reunir los Gestores de Fincas:
- Disponibilidad: Debe resultar accesible, ante cualquier consulta que les planteen los miembros de las comunidades que administra.
- Gestión: Debe ser capaz de coordinar las acciones necesarias para solucionar cualquier incidencia o consulta de forma ágil.
- Comunicación: Tan importante como la capacidad resolutiva o la disponibilidad, es la comunicación por parte del Administrador de las acciones que está realizando para solucionar cualquier incidencia y plazos estimados para su resolución.
- Administrador 2.0. Tiene que ser un Administrador abierto a las nuevas tecnologías, puesto que nuestro sector no puede seguir anclado en el siglo pasado. Nuevas generaciones, son propietarios de viviendas, y buscan diferentes formas de relación con su Administrador de Fincas: App de gestión, votaciones on line, tablón de anuncios virtuales, etc. Son algunas de las aplicaciones que en breve resultarán imprescindibles para realizar nuestro trabajo.
- Pro-activo: El administrador de Fincas no sólo debe limitarse a cumplir con sus tareas diarias y formales que son muchas y variadas como ya he mencionado anteriormente. Tenemos que aportar un valor añadido a las comunidades. Por ejemplo, si detectamos una desviación en una partida presupuestaria, debemos ponerlo en conocimiento de la junta directiva y proponer acciones para solucionarlo, o al menos, amortiguar el impacto en las cuentas de la comunidad. Esta pro-actividad, se extiende a muchos ámbitos:
- Revisión Contratos Suministros Energéticos
- Revisión Contratos Prestación Servicios
- Implementación de Medidas de Eficiencia Energética, etc
- Confianza: Cuando firmamos un contrato de con una Comunidad de Propietarios realmente estamos firmando un contrato de confianza, es decir, los vecinos que componen la comunidad nos otorgan su confianza para que gestionemos su comunidad de propietarios de la manera más eficiente posible. Nosotros, como Gestores de Fincas, debemos estar a la altura de esta confianza depositada y responder con profesionalidad, amabilidad y empatía, antes cualquier petición o consulta realizada por un vecino. Esta confianza no se adquiere instantáneamente en el momento de la firma del contrato, sino que tendremos que ganarla diariamente, con nuestro trabajo y profesionalidad.
Además de estas cualidades, que no todos los Gestores de Fincas poseen, ya que en gran medida dependen de la actitud de la propia persona o profesional;
Existen otra serie de requisitos más formales o académicos que se presuponen a nuestra profesión tales como:
- Título Universitario necesarios para realizar la profesión de Administrador de Fincas o Estudios Necesarios en una escuela oficial para conseguir la titulación Acreditas.
- Formación y Conocimiento de diversas materias: Contabilidad; Fiscalidad; Seguros; Protección datos
- Experiencia: Lógicamente cuanto más experiencia aporte mucho mejor. Ya que podrá implementar soluciones que han ocurrido en otras comunidades a otras fincas. Pero no es un requisito indispensable.
- Seguros de Responsabilidad Civil.
- Colegiación: No es imprescindible este requisito. Si que lo es la titulación necesaria.
Espero haberte ayudado con este artículo, si quieres saber más sobre el fantástico mundo de la gestión de fincas y conocerme a mi o mis servicios, aquí te dejo el enlace.